Argentina y Ucrania profundizan sus relaciones amistosas

Las relaciones diplomáticas entre Ucrania y Argentina pasan por un estado de situación actual excelente. Son 2 países amigos, que quieren la paz, que luchan y han luchado siempre por eso y por el respeto a los Derechos Humanos. Eso se ve plasmado en las distintas decisiones que emanan de las Naciones Unidas. Desde la asunción del Presidente de Argentina, Mauricio Macri en 2015, se abrió una nueva etapa de profundización de las relaciones bilaterales con Ucrania.
Al respecto el Embajador argentino en Ucrania, S.E. Alberto Alonso manifestó: “Estamos trabajando junto a nuestros colegas ucranianos para que esta profundización incluya el re lanzamiento de los mecanismos de consulta bilaterales. Así, por ejemplo, en noviembre de 2016 tuvimos la Reunión de Consultas Políticas, que no se llevaban a cabo desde 2011 y muy posiblemente en este 2018 se lleve a cabo la reunión de la Comisión Económica Mixta, que no se celebra desde hace 12 años.
En el año 2017 hemos celebrado dos aniversarios muy importantes. En primer lugar, los 25 años del inicio de las relaciones bilaterales entre la Argentina y Ucrania. Y en segundo lugar, los 120 años desde la primera migración ucraniana a la Argentina, más precisamente a la ciudad de Apóstoles en la provincia de Misiones. Asimismo, este 2018 se cumplen 25 años desde la Apertura de la Embajada Argentina en Kiev.”
En cuanto a las relaciones económico-comerciales, si bien existe una opinión subyacente sobre que Argentina y Ucrania son países muy parecidos en la conformación de estos sectores y que por lo tanto serian como una especie de competidores o como suplementarios en mucho de ellos, sin embargo se ha constatado que siempre existen complementariedades que deben ser exploradas, deben ser investigadas y deben ser trabajadas para que se puedan hacer nuevos y fructíferos negocios para ambas partes. En esa búsqueda –la representación diplomática argentina- ha estado trabajando muy fuerte en estos casi dos años que lleva en Ucrania y el optimismo ha crecido porque se encontraron amplias posibilidades de negocios para ambos países, -más de las que se piensan- razón por la cual, simplemente el trabajo constante permitirá superar los obstáculos que a veces se presentan en la realización de los negocios de comercio, de inversiones, o de economía.
“Afortunadamente las cifras del intercambio económico comercial del 2017 son superiores a las del 2016 y 2015, y muy superiores a las del 2014, cifras (las anteriores) que se explican por los inconvenientes que ha sufrido Ucrania y también porque la Argentina había caído en una especie de aislamiento en los dos últimos años del gobierno anterior. No nos hemos mirado frente a frente con Ucrania en esos años y desde mi llegada en 2016, he venido con toda la intención de que volvamos a mirarnos, porque, hay enormes oportunidades comerciales, y esta todo por hacerse, y no lo digo por ser optimista sino porque la realidad me demuestra que s iempre hay oportunidades para hacer cosas entre los países y porque Ucrania y Argentina tienen todo el potencial para hacerlo y se van a hacer.
Es así como haciendo una prospección de los intercambios para fines de 2018, el comercio entre ambos países habrá crecido más del 50%, con un superávit muy amplio para nuestro país.
En relación a la sociedad civil, el pueblo ucraniano siempre se ha mostrado muy cálido conmigo y me ha dado grandes satisfacciones. A mí me llamó la atención la avidez que existe por conocer la cultura argentina, la literatura, el arte argentino, las danzas, el tango, el folclore y eso lo vemos todas las semanas en las actividades que realiza la Casa Argentina de la Cultura que depende de la Embajada aquí en Kiev, porque la asistencia de ucranianos a estas actividades sobrepasan nuestros mejores deseos. Eso muestra que el ucraniano – un pueblo muy culto y bien educado- tiene avidez por conocer nuestra cultura. De alguna manera lo esperaba, porque tengo algunos amigos o amistades ucranianos en Argentina y ya había constatado el profundo aprecio que nos tienen.” Expresó el Embajador Alonso.
Es interesante señalar que la diáspora ucraniana en la Argentina es la séptima más importante del mundo; y la primera de un país que no forma parte de la Unión Europea. En Argentina, entre ucranianos propiamente dichos y descendientes de ucranianos, viven aproximadamente más de 450 mil ciudadanos, estando total y absolutamente integrados a los usos y costumbres de nuestro país.
Asimismo agregó: “Yo creo que por dos razones, por la hospitalidad que es normal y habitual de los argentinos, pero también porque el espíritu de integración que tiene la diáspora ucraniana es realmente proverbial y muy importante y han facilitado esa integración de una manera notable. Es una diáspora muy activa, mantiene sus costumbres, pero a su vez adquiere las costumbres digamos autóctonas, o las costumbres criollas de la República Argentina. Hay una gran cantidad de organizaciones civiles ucranianas en Argentina que verdaderamente contribuyen a las artes, a las ciencias, a la producción y son absolutamente bien conocidas por las autoridades. En dos palabras: es un pueblo que se hace querer y que en la Argentina ha tenido un desarrollo muy importante, estamos hablando de un desarrollo de 120 años. No puedo más que decir cosas muy agradables y muy bonitas de la diáspora ucraniana en la Argentina.
Toda esta rica actividad cultural, educativa y diplomática y, sobre todo, la inserción de esta gran cantidad de ucranianos en la Argentina, se traduce claramente en una comunidad ucraniana muy activa en sus actividades culturales y educativas en las provincias donde está arraigada: en la Provincia de Buenos Aires, en las Provincias de Chaco, de Misiones y también en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Hay varias comunidades de ucranianos que continuamente realizan diferentes actividades culturales y educativas para dar a conocer sus costumbres, sus tradiciones, su historia y su cultura. 
En lo que se refiere a Ucrania, nosotros hemos tenido la gran suerte de haber podido crear la Casa Argentina en Ucrania donde, obviamente, tratamos de difundir las actividades culturales, económicas, comerciales, históricas, y educativas de Argentina en Kiev y en Ucrania. Esta es una de las pocas instituciones de este tipo que tenemos en el mundo, donde organizamos actividades de toda índole: desde seminarios de promoción de inversiones y comercio hasta cursos de cocina, pasando por clases de tango y de folclore, una escuela de turismo dirigida a agentes turísticos, ciclos de cine argentino con subtítulos en ucraniano, dos cursos de literatura argentina para participantes con nivel intermedio y avanzado de español, etc. Por ejemplo, hemos hecho presentaciones de libros de Jorge Luis Borges, uno de nuestros principales escritores, de manera histórica, traducidos al ucraniano en el marco del programa “Sur”, exposiciones y visitas guiadas de artes plásticas y de fotografía, y así muchísimas actividades, más con una repercusión verdaderamente amplia y extendida entre los que viven aquí en Kiev e incluso entre los que vienen de otras ciudades.
Con gran satisfacción, podemos decir que la Casa Argentina desborda de actividades y horarios que hacen que esté constantemente activa y en contacto con un número muy extenso de ciudadanos ucranianos que asisten a ellas y tratan de “empaparse” de nuestro muy amplio y rico acervo cultural.
Pensando en que nuestros lazos se proyecten a través de las nuevas generaciones, en 2016 concluimos, en la Casa Argentina, un concurso de pintura juvenil para conmemorar el Bicentenario de la Declaración de Independencia, en cooperación con dos escuelas públicas donde se enseña el idioma español. Esto desde el punto de vista cultural. Desde el punto de vista educativo hemos tenido un gran éxito, ya que en 2015, luego de amplias negociaciones entre los dos partes, entró en vigor el “Tratado para el Reconocimiento de Títulos Universitarios” -que era una aspiración muy grande que tenía la comunidad ucraniana en la Argentina; ya que muchos ucranianos residentes en nuestro país, pero también muchos residentes aquí en Ucrania, utilizan o desean utilizar las excelentes condiciones académicas de nuestros colegios y universidades- y que pudo concretarse. 
Por último, en 2017 dimos inicio a la “Cátedra Argentina Virtual”, en el marco de lo que se da en llamar la “Diplomacia Pública”, que reúne a especialistas, profesores y estudiantes argentinos y ucranianos provenientes de distintos ámbitos de las esferas cultural, científica y educativa, así como a representantes de la comunidad ucrania en la Argentina, mediante un ciclo de videoconferencias en español y ucraniano que ha permitido construir un fructífero ámbito de diálogo entre nuestras naciones.
Soy consciente que al asumir la tarea de Embajador, uno tiene el poder de influir en ciertas cosas. El desafío es ayudar con un pequeño granito de arena en la protección y construcción de la paz. Es el trabajo dirigido a la resolución de las cuestiones controvertibles de manera pacífica, con el respeto al Derecho Internacional, a la comunidad internacional, siempre pensando en el bienestar de los pueblos. Si como diplomático puedo contribuir a eso, entonces, habré cumplido excelentemente mi tarea.”
Cabe destacar que desde la creación de la República Popular de Ucrania, en 1918, Argentina fue el primer país latinoamericano en reconocer a Ucrania como estado independiente en 1921.