La Constitución de la República Eslovaca fue firmada ceremoniosamente el 3 de septiembre de 1992 en el Castillo de Bratislava por el entonces presidente de la SNR Ivan Gašparovič y el primer ministro Vladimír Mečiar.
Su aprobación fue precedida por un acto relacionado con la adopción de la Declaración sobre la Soberanía de la República Eslovaca. Fue aprobado por el Parlamento eslovaco el 17 de julio de 1992, en un momento en que la República Eslovaca todavía formaba parte de la República Federativa Checa y Eslovaca. Se llevaron a cabo negociaciones entre los representantes checos y eslovacos sobre el arreglo futuro de las uniones entre eslovacos y checos. Su aceptación movió este proceso a un acuerdo sobre la partición de Chequia-Eslovaquia.
Ya en agosto de 1992, la legislatura eslovaca comenzó a discutir el borrador de la nueva constitución eslovaca. En la reunión de representantes políticos eslovacos y checos en Villa Tugendhat en Brno el 26 de agosto de 1992, se tomó una decisión política definitiva sobre la disolución de la República Federal Checa y Eslovaca a partir del 1 de enero de 1993.
La Constitución consiste en un resumen de las normas jurídicas básicas sobre la organización social, la organización política y el estatuto de los ciudadanos, que vincula a todas las autoridades del Estado y a los ciudadanos. Consta de un preámbulo y nueve capítulos. Regula los derechos y libertades fundamentales, los derechos políticos, los derechos de las minorías nacionales y grupos étnicos, los derechos sociales, culturales y económicos, el derecho a la protección judicial y legal.
La Constitución también determina la separación de poderes como uno de los principios fundamentales del estado de derecho. Sobre esta base, el poder legislativo en la República Eslovaca está representado por el Consejo Nacional de la República Eslovaca, el poder ejecutivo por el gobierno y el presidente, y el poder judicial por el Tribunal Constitucional de la República Eslovaca y tribunales imparciales e independientes.
Su mayor parte entró en vigor el 1 de enero de 1993, es decir, el día del establecimiento de la República Eslovaca independiente.
En razón de esto, el Embajador de la República Eslovaca en Argentina, Su Excelencia, Rastislav HINDICKÝ, celebro el 30 Aniversario de la Constitución Eslovaca con una recepción en la Residencia oficial, a la cual acudieron representantes del Gobierno Nacional, cuerpo diplomático e invitados especiales.