Argelia, pasado y presente de una Nación que crece a pasos agigantados

El Embajador de la República Argelina Democrática y Popular en Argentina, S.E. Lotfi Sebouai, recibió en la representación diplomática a María Laura Arano, con quien conversó sobre la historia, el posicionamiento actual del país y las relaciones diplomáticas entre ambos países. 

Con una mirada hacia todas las etapas que ha atravesado el país, fue marcando un camino hacia la transformación social, cultural, económica, educativa, social y política llegando a la consolidación de una de las principales economías del continente africano. 

Al respecto el Embajador Lotfi señaló que durante la era otomana, Argelia fue uno de los países más poderosos en la Cuenca del Mar Mediterráneo. También ocupó una posición especial en el estado del Califato, ya que gozaba de una independencia total que le permitía tener vínculos políticos y comerciales con la mayoría de los países del mundo, pero fue el primer país en reconocer el gobierno e incluso las primeras relaciones con la mayoría de los países del mundo, es el primer estado que reconoce el gobierno emergido de la Revolución francesa en 1789 y reconoció la revolución americana después de su independencia de la corona británica en 1776.

La invasión de Argelia en 1830 fue una operación militar a gran escala ordenada por el rey francés Carlos X (Decimo) para aumentar su popularidad entre los dos  pueblos francés y argelino, según ellos, las acciones en el Mediterráneo, son capacidades que representan un botín económico importante que puede proporcionar a Francia el dinero y las contribuciones que se necesita para revitalizar sus arcas.

En el año 1827, se produjo el incidente con el abanico del Dei, que Francia provocó, y lo tomó como un insulto, expresa el Embajador, dado que como  resultado se inició un asedio a Argelia durante tres años.

A lo largo de 132 años de historia el país presenció (entre el 5 de julio de 1962 y 1830) muchas revoluciones populares y operaciones de  resistencia que dieron comienzo con el Emir Abdelkader Al-Djazaìri, lo que condujo a llevar al FLN -Frente de Liberación Nacional-, a ser testigo de una guerra de independencia desde el primero de noviembre de 1954 hasta el 5 de julio de 1962. Como resultado hubo 1,5 millones de mártires. Los historiadores dicen que durante toda la presencia del colonialismo francés, Argelia pagó nada menos que con 7 millones de vidas y, paralelamente, el número del ejército de la ocupación en 1956 sobrepasó los 400 mil soldados que fue apoyado por El Archivo Atlántico (The Atlantic File).

El día del anuncio de la victoria aliada en la Segunda Guerra Mundial contra los nazis, el 8 de mayo de 1945, activistas y ciudadanos salieron en muchas ciudades argelinas exigiendo a Francia su independencia, la policía y las fuerzas militares respondieron a estas manifestaciones pacíficas con una brutal matanza que dejo un saldo de 45 mil ciudadanos en un día. Estas masacres se consideran como una imagen negra de la política de exterminio que persiguió la Francia colonialista.

El día del anuncio de la victoria aliada en la Segunda Guerra Mundial contra los nazis, el 8 de mayo de 1945, activistas y ciudadanos salieron en muchas ciudades argelinas exigiendo a Francia su independencia, la policía y las fuerzas militares respondieron a estas manifestaciones pacíficas con una brutal matanza que dejó un saldo de 45 mil ciudadanos en un día. Estas masacres se consideran como una imagen negra de la política d’exterminio que persiguió la Francia colonialista.

Luego de estas masacres, la conciencia sobre la cuestión nacional comenzó a sufrir una transformación acelerada que derivó en el paso de la lucha política a la lucha armada, que fue consagrada en 1947 con la creación de la Organización Especial, que sirvió como primer núcleo con el estallido de la guerra, la gloriosa revolución de liberación del 1 de noviembre 1954.

En ese marco, expresa el diplomático argelino que se recuerda el papel importante que jugó el partido socialista en argentina y las organizaciones sindicales durante los años 50 y 60 del siglo pasado para ayudar a Argelia, que estaba bajo la colonización. Dicha manifestación de apoyo hacia mi país, solicitando la la independencia fue organizado en abril de 1961, y es de resaltar el compromiso en este aspecto del Sr. Fernando Mitijans expresidente de la Asociación de Futbol Argentino (AFA) quien falleció el 2 de marzo de 2015 a la edad de 94 años.  

Es importante recordar todos estos eventos históricos, donde la historia moderna de los pueblos sobre todo de aquellos que vivieron bajo el yugo del colonialismo, que la gran distancia y la naturaleza del colonialismo en todos los continentes  a través del mundo, no olvidaron al militante, al político y al nacionalista en vistas de confirmar que el principio de la libertad, la igualdad y el derecho a vivir correctamente, todos estos son principios comunes a toda la humanidad.

En cuanto a las relaciones diplomáticas entre ambos países se establecieron en junio de 1964 y se fueron fortaleciendo con el paso de los años mediante el intercambio de visitas oficiales, donde se firmaron numerosos acuerdos en diversos campos como la educación, la agricultura, la salud y la cultura, además de la coordinación bilateral en materia de asuntos internacionales, humanitarios y de seguridad.

Las etapas más importantes del desarrollo político, económico y cultural de Argelia, tras su independencia, son de relevancia ya que perpetuó un pesado legado colonial, sobre todo cuando se lanzó a la batalla de la edificación. La situación se deterioró mucho en todos los ámbitos, especialmente en el económico, social y sanitario, ya que el colonizador tomó las riquezas del país antes de abandonarlo. vaciando las arcas del Estado y extrayendo dinero de los bancos, dejando al país en una situación económica y social sumamente difícil.

Culturalmente, el analfabetismo representó un 95% de los habitantes, aunque se estimaba en unos 15% antes de la llegada del colonialismo, que se esforzó para empobrecer al pueblo por todos los medios, especialmente destruyendo escuelas e impidiendo la enseñanza de la lengua árabe y del Sagrado Corán.

A la luz de este difícil impulso, los políticos nacionales trabajaron para restablecer el digno Estado argelino de acuerdo con los principios del 1 de noviembre de 1954. Este proceso logró resultados notables, que contribuyeron en la estabilidad y en la organización de los asuntos públicos, enfrentando el desafío relacionado con el desarrollo y trabajando para eliminar los diversos restos del colonialismo que buscaba destruir todo. En 1964, el Congreso del Frente de Liberación Nacional adoptó la Carta de Argelia que eligió el sistema socialista de gestión con el objetivo de establecer una verdadera política industrial y cultural además de la dominación del sector público y la autogestión en el área agrícola hasta la realización de la revolución agraria. Este último previó principalmente modernizar el mundo agrícola.

Argelia ha invertido sus ingresos de petróleo y gas en el sector industrial internacional para acelerar el crecimiento sostenible, absorber el desempleo y diversificar los sectores agrícola y popular. El país desde 1962 hasta 1989, experimentó muchas transformaciones políticas, económicas y sociales, especialmente después de los acontecimientos del 5 de octubre de 1988; Este proceso constituyó un giro decisivo en la historia del país porque condujo a la adopción de una nueva constitución, el nacimiento del sistema multipartidista y el surgimiento de la prensa independiente.

Con la Ley de Armonía Civil tras un referéndum popular celebrado el 16 de septiembre de 1999, como alternativa a la Ley de Misericordia adoptada el 25 de febrero de 1995 y en un intento de poner fin definitivamente a los actos terroristas, El 29 de septiembre de 2005, el Estado presentó un proyecto de Carta de Paz y Reconciliación con un referéndum popular, donde recibió un voto abrumador a favor del pueblo Argelino en todos sus artículos por 97% y fue implementado por prescripción legalmente el 28 de febrero de 2006.

El resultado que nos ha beneficiado con la implementación de esta Carta se considera un resultado positivo desde todo punto de vista, ya que se tuvieron en cuenta los elementos políticos, económicos, educativos religiosos y culturales, con el objetivo de eliminar todo lo que pueda alentar el extremismo y difundir ideas irracionales provocando marginación y exclusión, especialmente entre los jóvenes.

Con estas medidas legales encaminadas al apaciguamiento, que fueron acompañadas de un aumento significativo del gasto público, la asignación de más fondos de apoyo alimentario, aumentos salariales y préstamos sin intereses a los jóvenes para establecer empresas, las autoridades pudieron proteger al país de los efectos de la Primavera Árabe, que estalló en 2011 en varios países árabes, empezando por el vecino Túnez.

Durante el período comprendido entre 2000 y finales de 2018, Argelia trabajó arduamente para romper el aislamiento del país en la escena internacional, reanudando el desarrollo económico y social, además de restaurar la autoridad y el prestigio del Estado, fortalecer la unidad y apoyar los pilares de la identidad nacional.

En el plano económico, el país implementó varios programas de desarrollo en respuesta al notorio aumento de los precios del petróleo en el mercado internacional, trabajando para valorar y desarrollar la riqueza nacional.

Mejorando  y modernizando  el marco de inversión; Preservando el medio ambiente al servicio del desarrollo sostenible; Incrementando eficacia del papel económico del Estado; Fortaleciendo  el marco general para el funcionamiento de la economía nacional.  

Con una economía más diversificada y racional basada en las competencias humanas y la ciencia; Algunos expertos dicen que Argelia gastó durante este período el equivalente a un billón de dólares en programas de infraestructura, grandes proyectos estructurados y en proporcionar condiciones de vida digna a los ciudadanos y las necesidades para su avance como capital importante en la visión estratégica a largo plazo. 

En este contexto, el representante diplomático dice que algunas cifras relacionadas con el crecimiento económico de Argelia, son el  PBI que alcanzó los 245.000 millones de dólares en 2023, lo que sitúa a Argelia en el tercer lugar de África, después de Sudáfrica y Egipto. La tasa de crecimiento fue del 4,1% respecto al año pasado y, según estimaciones, este año llegará al 5,3%. Argelia representa un importante mercado de consumo con 45 millones de habitantes y fronteras vecinas con 105 millones de consumidores respaldados por acuerdos en el marco de la Zona de Libre Comercio Africana y acuerdos de asociación con la Unión Europea con un total de 450 millones de consumidores y la Zona de Libre Comercio Árabe con 420 millones de personas. A nivel de infraestructura, el país cuenta con 51 aeropuertos, 51 puertos marítimos, una red ferroviaria con una longitud de 4.695 km y una red vial estimada en 140.920 km.

En el ámbito de los hidrocarburos, Argelia ocupa el puesto 16 del mundo en términos de reservas de petróleo y el 10 en términos de gas natural, además de su potencial demostrado en el ámbito de las energías nuevas y renovables, los metales preciosos y las tierras raras como el uranio, que actualmente se encuentra sin explotar.

El país tiene 48,1 millones de hectáreas agrícolas, de las cuales 8,6 millones de hectáreas son cultivables, 1,47 millones de hectáreas son de regadío, 32,7 millones de hectáreas son tierras de pastoreo y 4,1 millones de hectáreas son bosques.

El estado anunció que busca llegar a un millón de hectáreas adicionales de tierra irrigada en el sur del país, alcanzar la autosuficiencia en trigo duro en 2025, de cebada y maíz en 2026.

Argelia tiene industrias químicas y petroquímicas avanzadas, así como complejos siderúrgicos, también tiene una industria de tecnología avanzada y un sector de economía verde, representado en la valorización de residuos, y la farmacia ambiental y extrayendo aceites esenciales.

Entre otras cosas, Argelia ha establecido una ley de inversión extranjera que incluye muchos incentivos además de costos energéticos muy bajos, el país proporciona instalaciones e infraestructura necesarias para operaciones exitosas.

Debido al éxito del proceso de inversión, la Agencia Argelina de Promoción de Inversiones registró a principios de este año 113 proyectos extranjeros, lo que indica una mejora del clima empresarial en Argelia.

Todos estos datos muestran la importancia de los avances realizados por el Estado para racionalizar la gestión de recursos, combatir la corrupción, hacer avanzar la economía nacional y mejorar las condiciones sociales y económicas de los ciudadanos, por ejemplo, el número de estudiantes este año alcanzó los 12 millones de niños, y en el nivel universitario hay 1,8 millones de estudiantes, incluidos 400.000 nuevos estudiantes, además de más de un cuarto de millón matriculados en el sector de la formación profesional.

Los datos y hechos presentados sobre Argelia, pasado, presente y futuro, significan que el país no sufre problemas como cualquier otro país del mundo y la mejor prueba de ello es el surgimiento del bendito movimiento el 22 de febrero de 2019. Rechazando la candidatura del difunto presidente Abdelaziz Bouteflika para un quinto mandato presidencial, ya que todos intensificaron los esfuerzos para preservar la seguridad y las capacidades del país, incluido el Ejército Nacional Popular.

Las elecciones presidenciales organizadas en 1955 permitieron al Sr. Abdelmadjid Tebboune ascender al poder, ya que lanzó talleres de reforma política redactando una nueva constitución para el país, organizando elecciones legislativas y reformulando leyes importantes. El 7 de septiembre, el presidente de la República fue elegido para un segundo y último mandato presidencial, de conformidad con la Constitución, con el fin de completar lo realizado y trabajar para llevar a Argelia a la seguridad en varios niveles.

Desde esta perspectiva, el nuevo gobierno trabajará para lograr un cambio hacia un modelo de crecimiento y creación de empleo liderado por el sector privado, especialmente racionalizando el gasto público, reduciendo las importaciones, promoviendo las exportaciones no petroquímicas e introduciendo importantes mejoras en la economía nacional y el entorno empresarial, incluida la reforma de los bancos y las instituciones estatales.

En relación a los principios y objetivos de la política exterior argelina, la Constitución del 2020  reafirma los principios y valores por los que se conoció la diplomacia argelina desde la guerra de la revolución de liberación hasta después de la independencia donde algunos de los ítems mas importantes son:

– Abstenerse de recurrir a la guerra para lograr la soberanía legítima de los pueblos circundantes.

-Esforzarse por resolver las disputas internacionales por medios pacíficos.

-Posibilidad de participar en operaciones de mantenimiento de la paz en el marco de los principios y objetivos de la ONU, de la Union Africana  y de la Liga de Estados Arabes.

-La solidaridad de Argelia con todos los pueblos que luchan por la liberación y el derecho a la autodeterminación y contra toda discriminación racial.

-Apoyar la cooperación internacional y desarrollar relaciones amistosas entre países sobre la base de la igualdad, el interés mutuo y los asuntos internos.

Quienes sigan la actividad diplomática argelina en los últimos años notarán que el país enfrenta complejos desafíos regionales e internacionales, sobre esta base Argelia trata de rever su mapa de coalición geoestratégica en Africa, especialmente después de la guerra ruso-ucraniana y la propagación del Coronavirus.

En resumen, el curso geopolítico y geoeconómico mundial está en constante cambio, lo que hace necesario que Argelia se adapte a estas transformaciones. No encuentra un papel efectivo en esta nueva dinámica geopolítica, especialmente en África, la región del Sahel, el Mediterráneo. y Medio Oriente, y pide dar prioridad a las soluciones políticas y diplomáticas en lugar de las opciones militares.

En este contexto, Argelia apoya las cuestiones de seguridad, integración, acercamiento regional, reconciliación y procesos de estabilidad en el mundo, basándose en su experiencia y conocimientos.

La diplomacia argelina intenta contribuir, a través de buenos oficios, a resolver las crisis presenciadas en Mali, Níger, Burkina Faso, Libia y Sudán. Por otra parte, Argelia inició el pasado 1 de enero su nombramiento como miembro no permanente del Consejo de Seguridad por un período de dos años. Entre sus prioridades están el fortalecimiento de los asentamientos pacíficos, el papel de las organizaciones regionales y la promoción del estatus de las mujeres y los jóvenes en los procesos de paz y activar el papel de la seguridad en la lucha contra el terrorismo.

La cuestión palestina es parte integral de las constantes del Estado argelino, que está haciendo grandes esfuerzos para conceder a Palestina la membresía plena, destacando cada vez el derecho del pueblo palestino a establecer su Estado con el este de Jerusalén como su capital, y con las fronteras de 1967 e instando al Consejo de Seguridad a emitir una resolución para una solución de dos Estados, poniendo fin a la ocupación israelí y apoyando plenamente la Iniciativa de Paz Árabe, además de trabajar por todos los medios para reunir a las facciones palestinas.

Durante las reuniones del Consejo de Seguridad que no cesaron desde los eventos de Gaza, en octubre pasado, Argelia no cesó de invitar a los Estados miembros a unir sus voces para detener la agresión y terminar el bloqueo y en sucesivas reuniones del Consejo enseñó y puso fin al asedio impuesto y el rechazo al desplazamiento de la población, y aportarles asistencia sin ningún condicionamiento además de invitarlos para reconocer los derechos completos al pueblo palestino.

En lo que se refiere a los ataques aéreos  de Israel contra el Líbano, Argelia los condena con fuerza y los considera como una prueba concluyente de la falta de voluntad de Israel para alcanzar la paz, y pide a la comunidad internacional que presione a Israel para que se comprometa a aplicar las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad en la materia.

En cuanto al asunto del Sáhara Occidental, Argelia apoya desde hace cincuenta años la lucha del pueblo saharaui por la autodeterminación disfrutando del libre y justo hecho de que el territorio es la última colonia de África desde 1963.

De conformidad con las Resoluciones 1514 y 1541 emitidas por la Asamblea General de Seguridad. La Corte Suprema también sitúa la cuestión del llamado a un nuevo orden mundial en el centro de las preocupaciones actuales de la diplomacia penal, que con el tiempo enfatiza la necesidad de fortalecer un mundo multipolar para enfrentar las amenazas a la seguridad intercontinental, que el actual orden mundial ha sido capaz de superar, logrando así la integración y el acercamiento.

El primer paso es a través de un nuevo sistema que se ha convertido en una necesidad global, y en una visión común para muchos países basada en la justicia y un solo país, especialmente económica en términos de distribuir la riqueza y tratar de salir del monopolio del dólar y las condiciones impuestas por el sistema financiero internacional a los países en desarrollo, lo que restablecería la posición estratégica de estos países en el ámbito internacional.

En cuanto a la validez del Consejo de Seguridad, Argelia ha expresado repetidamente su debilidad para resolver y prevenir muchos conflictos y activar su papel en el establecimiento de la paz y la seguridad internacionales y apoyar a las partes justas, especialmente poner fin al colonialismo, impidiendo la representación de África además de reformar el derecho de veto, que se basa en el principio de igualdad entre países.

El ejemplo más destacado del doble uso de este derecho es la situación de los crímenes relacionados con Israel en Palestina y otros países vecinos. Antes de concluir este capítulo, cabe señalar que las relaciones de Argelia con América Latina y la región del Caribe se han caracterizado a lo largo de la historia por una influencia y un sistema de elogios mutuos a lo largo de los años.

Con respecto a las relaciones bilaterales entre Argelia y la República Argentina, el embajador Sebouai destaca que ambas naciones mantienen relaciones ejemplares, que les confieren un carácter de amistad, armonía y cooperación. La mejor prueba de ello es el envío del presidente de la República, Abdelmadjid Tebboune, al tercer hombre de Estado, el Sr. Brahim Boughali, presidente de la Asamblea Nacional y Popular, para representarlo en la ceremonia de toma de posesión del presidente argentino Javier Milei el pasado 10 de diciembre de 2023. 

Nuestras relaciones bilaterales presenciarán un salto cualitativo en un futuro próximo, dada la voluntad política común encaminada a dar un nuevo impulso a estas relaciones y beneficiarse del enorme potencial que abundan en ambos países.

En este contexto, cabe señalar que desde 1986 se inició el intercambio de visitas entre Argelia y Argentina a nivel presidencial y ministerial, que permitieron la firma de una serie de acuerdos bilaterales en los campos de economía, finanzas, comercio, ciencia y tecnología, salud, cultura y deporte. Esta serie de visitas comenzó con el viaje del presidente Raul Alfonsin a Argelia en 1984, y el presidente Chadli Bendjedid devolvió la visita en 1986. En 2008, la presidenta Cristina Kirchner realizó una visita de Estado a Argelia.

Entre los acuerdos más destacados firmados entre ambas partes se encuentran:

El Acuerdo de Cooperación Económico y Comercial de 1983

El Acuerdo de Cooperación Científico y Tecnológico de 1984

Un acuerdo de promoción mutua en el ámbito de las inversiones en el 2000.

El Acuerdo sobre el desarrollo del uso pacífico de la energía nuclear en 2008.

El Acuerdo de cooperación entre universidades en 2016.

Cabe recordar que desde 2016, Argelia se benefició de los servicios directos de la operación tripartita de cooperación sur-sur propuesta por la Argentina. En este marco, Argelia esta considerada entre los primeros países árabes  y africanos que se beneficiaron con este sistema que esta principalmente destinados exclusivamente a los estados latinoamericanos.

En este contexto, los dos países han logrado 11 proyectos, entre proyectos que ya han sido completados y otros en fase de implementación. Entre estos proyectos, cinco están en el campo de la pesca y la acuicultura, uno en el sector financiero, tres en el campo de mejora de tierras y dos están relacionados con la salud pública.

Cabe recordar aquí que Argelia es considerada el primer país en adquirir el primer reactor nuclear de fabricación argentina con fines pacíficos y científicos, lo que sin duda contribuyó a la fabricación y exportación de dichos reactores a otras partes del mundo.

Fruto de esta transacción, INVAP abrió una oficina de representación en Argelia para cubrir las necesidades de los países de África y Medio Oriente en este sector estratégico.

En cuanto al intercambio comercial bilateral, alcanzó los 2.200 millones de dólares en el año 2022 y continuó al mismo ritmo en los años siguientes, y la balanza comercial sigue siendo positiva para la parte argentina, ya que sus exportaciones a Argelia ascendieron a unos 200 millones de dólares.

Respecto a las exportaciones argentinas, se componen de alimentos de amplio consumo, especialmente cereales y derivados de la leche principalmente leche en polvo, además de materias primas para la alimentación de ganado.  Las exportaciones argelinas incluyen petróleo, productos petroquímicos y derivados de fosfato.

Para promover esta cooperación, los dos países están trabajando en la preparación de las reuniones del Gran Comité Económico Conjunto y del Comité de Consulta Política, además de establecer un consejo conjunto de empresarios de Argelia y Argentina. Está previsto que estos comités se reúnan antes del fin de este año.

En el plano internacional, los dos países tienen posiciones comunes, casi similares, en muchos temas contemporáneos relacionados con la defensa de la diplomacia multilateral como marco de consulta y negociación, el papel de las Naciones Unidas con la necesidad de reformarla, la promoción de la paz internacional y seguridad, luchar contra el terrorismo, respetar los derechos humanos y reconstruir un orden más justo y equitativo.

Argelia y Argentina también comparten una larga tradición de apoyo mutuo para las nominaciones a puestos de la ONU y organizaciones internacionales especializadas.