Imagine van Gogh está compuesta por la proyección simultánea de unas tres mil imágenes en las paredes, el suelo y en lienzos de más de ocho metros de altura, posee además una presentación adaptada a la estructura del pabellón. La impresionante selección de obras proyectadas aquí no podría coincidir físicamente en el mismo lugar y al mismo tiempo: se trata de piezas que forman parte de prestigiosas colecciones de museos, como el Museo d’Orsay de París, la Galería Nacional de Arte de Londres, el Museo Van Gogh de Ámsterdam, el Museo de Arte Moderno MoMA y el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York.
Con una tecnología de avanzada, denominada “imagen total”, un concepto original de las exposiciones inmersivas creada en 1977 por el fotógrafo y cineasta francés Albert Plécy y desarrollado por su nieta Annabelle Mauger para esta exhibición itinerante que ya recorrió varias capitales del mundo desde su lanzamiento en La Cathédrale d’Images (Francia) en 2008.
La escenografía, realizada por Julien Barón, incluye la proyección simultánea de unas tres mil imágenes a través de 48 proyectores láser de alta definición que transmiten 30 minutos de señales de video y audio sincronizadas en bucle por un software de avanzada tecnología.
Los espectadores se sumergen en unas 200 obras de Vincent Van Gogh, en formato de gran tamaño, proyectadas en el piso de la sala, las paredes y móviles monumentales de más de ocho metros de altura, donde sus famosas obras y una música envolvente nos sumerge en y a lo largo de su vida y obra.
Por la alta demanda para visitarla, Daniel Grinbak, el productor que la trajo a Argentina, decidió extenderla hasta el 31 de julio con nuevos horarios por las vacaciones de invierno.
Las entradas se pueden adquirir de manera online o en boletería, Av. Santa Fe 4363, La Rural.