Luego del éxito que significó para Argentina, ser anfitrión del G20, llevado a cabo por primera vez en Latinoamérica, logrando no solo reunir a los mas poderosos líderes mundiales en un solo lugar, sino además, consenso para elaborar una declaración conjunta, el mismo se traslada al país del sol naciente.
Japón presidirá el G20 durante el 2019, quien tendrá a su cargo la próxima cumbre a realizarse en la ciudad de Osaka el 28 y 29 de Junio.
Desde el 2008, 12 países miembros presidieron el G20: Australia, Canadá, Estados Unidos, Rusia, Turquía, México, Francia, Reino Unido, China, Corea del Sur, Alemania y Argentina.
Ahora es el turno de Japón. Su primer Ministro, Shinzo Abe, planea abordar temas tan desafiantes como los provocados por la revolución digital, entre ellos, el impacto de la inteligencia artificial, los puestos de empleos que desaparecerán por la robótica y las reformas educativas para que la innovación “no produzca nuevas desigualdades”.
Pero ahora conozcamos un poco mas acerca de la ciudad donde se desarrollará la próxima Cumbre de Líderes.
Si bien Kioto atrae muchísimo por su atractivo cultural y turístico, hoy les hablaremos de Osaka, la ciudad anfitriona de la próxima sita del G20.
Osaka es la tercera ciudad más grande de Japón (después de Tokio y Yokohama). Posee uno de los puertos y centros industriales mas destacados del país. Razón suficiente para visitarla, conocer y disfrutar, no solo de la hospitalidad de su gente, sino también de su rica gastronomía.
La cantidad de días para recorrer dicha ciudad, depende de los intereses personales de cada uno. Pero con dos o tres días está mas que bien. Para moverse por la ciudad -y esto lo recomendamos en cada lugar del mundo- esta el bus y el tren, aunque no hay nada mejor, además de mezclarse con la gente local en los transportes públicos, que caminar y perderse por sus calles. Y al hacerlo podrás encontrar cosas que en ningún otro lugar verías, como ser un edificio atravesado por una autopista; el famoso Edificio Gate Tower. Desde comienzos del período Meiji, las empresas de explotación de madera y carbón tenían los derechos de propiedad sobre el terreno, pero el cambio gradual de la sociedad hacia otras fuentes de energía causó el deterioro de los edificios del sector. En 1983 se decidió remodelar toda el área, pero los permisos fueron denegados porque se estaba planeando el trazado de la autopista. Cuando el desarrollo de la misma estaba casi terminado surgió el problema: el pequeño pero crucial trozo de tierra destinado a apoyar el centro de la rampa de salida Umeda, era propiedad, desde 1870, de una empresa moribunda de madera y carbón cuyos propietarios no estaban interesados en vender los valiosos derechos de propiedad. Como no había espacio para cambiar la rampa de salida, las dos partes se sentaron y comenzaron a negociar.
Los titulares de los derechos de propiedad negociaron con la empresa Hanshin Expressway durante aproximadamente cinco años hasta llegar a la solución actual. Aunque generalmente las empresas viales compran las tierras sobre las que construyen, no siempre se llega a un acuerdo para la venta, como en este caso, y en Japón nos se pueden expropiar los terrenos.
Habitualmente, aún en el país nipón, las carreteras se construyen sobre o bajo tierra, pero que pase a través de un edificio es algo realmente sorprendente.
El Edificio Gate Tower es un claro ejemplo de las habilidades de la ingeniería urbana en Japón, y por ende uno de los lugares mas fotografiados de dicha ciudad.
Asimismo, se puede pasear por el barrio de Tennoji, que es un poco como otro Japón, con su zona de love hotels y karaokes antiguos. Si viaja con niños, entrar al zoológico de Tennoji puede resultar interesante (aunque los zoos japoneses, especialmente los de las ciudades, suelen ser muy pequeños). Y si queres también, esta ciudad te brinda la posibilidad de compartir un rico café mientras acaricias a unos lindos gatitos.
Una visita a Osaka no esta completa si no se visita el santuario Sumiyoshi Taisha, el santuario más importante de la ciudad, quien nos deslumbrará con más de 700 lámparas de madera.
También puede sentirse protagonista de una película futurista de los años 50, o casi, en Blade Runner, paseando por el barrio de Shinsekai, cuyas calles inspiraron al film, además de subirse al observatorio o símbolo del barrio, la torre Tsutenkaku.
Realmente hay mucho por descubrir en Osaka, es una ciudad que sorprende con sus mil restaurantes, sus spa tradicionales y ni que hablar de sus preciosas vistas de la ciudad, tanto de día como de noche de algunas de las torres; recomendamos la torre Abeno Harukas.
Y para finalizar con este pequeño parorama de la ciudad, los amantes del shopping, no pueden dejar de visitar el famoso Namba Parks, un complejo de 30 pisos con un centro comercial a cielo abierto con varios niveles escalonados y ajardinados. Todo un deleite visual.
Luego de este recorrido podemos comenzar a entender, al menos un poco, la misteriosa esencia de Osaka.