Pakistán a través de sus sabores: una tradición que se cocina a fuego lento
Desde el shabdeg hasta el biryani, la cocina pakistaní refleja siglos de historia, diversidad regional y un uso magistral de especias que despiertan todos los sentidos
La gastronomía de Pakistán es un fiel reflejo de su historia, geografía y diversidad cultural. A lo largo de los siglos, ha absorbido influencias de la India, Oriente Medio, Asia Central y Persia, dando lugar a una cocina intensa, colorida y profundamente aromática.
En sus mesas, el arroz, el pan y el trigo son elementos esenciales, acompañados por una abundante variedad de frutas, verduras y, especialmente, carnes: cordero, pollo, ternera y mariscos son protagonistas cotidianos. Sin embargo, si hay algo que define a la cocina pakistaní es el uso generoso de especias, hierbas y condimentos, que le otorgan fama mundial como una de las más picantes y sabrosas del planeta.
A continuación, un recorrido por algunos de los platos más emblemáticos de este universo culinario:
1. Shabdeg
Este tradicional guiso, cuyo nombre significa “caldero nocturno”, se cocina lentamente durante toda la noche. Combina cordero, remolacha y nabo en un caldero de cobre, dando como resultado una preparación espesa, profundamente aromática y reconfortante.
2. Aloo Gosht
Un clásico del hogar pakistaní, preparado con carne de cordero o ternera y papas, cocidas en una rica salsa de tomate especiada con jengibre, ajo y canela. Suele servirse bien caliente, acompañado de arroz o paratha (pan plano).
3. Chapli Kebab (Peshawari Kebab)
Originario de Peshawar, este kebab se elabora con carne molida y una mezcla de especias. Se cocina a la plancha y se acompaña con tomate, cebolla, cilantro fresco y limón. Es una popular comida callejera y un plato imprescindible en reuniones familiares.
4. Sai Bhaji
Un guiso vegano que combina espinacas, hojas de fenogreco y otras verduras de estación, cocidas en una sopa de lentejas especiada. Se sirve con arroz o pan, y es ideal para quienes buscan opciones más ligeras y saludables.
5. Nihari
Quizás uno de los platos más representativos de la cocina pakistaní. Se trata de un guiso cocido a fuego lento durante horas —o toda la noche— con cordero o ternera, aromatizado con jengibre, cilantro, pimienta negra, garam masala y limón. La carne se deshace al contacto y el sabor es profundo y reconfortante.
6. Haleem
Este guiso espeso combina carne desmenuzada con lentejas y trigo. Se adorna con cebolla frita, jengibre fresco, chiles verdes y un toque de jugo de limón. Es muy consumido durante el Ramadán por su poder nutritivo.
7. Pulao
Un plato de arroz especiado, suave y elegante, que se prepara con carne, verduras y arroz basmati, a menudo acompañado por raitha (yogur condimentado). Suele servirse en ocasiones especiales o festividades.
8. Biryani
El rey de las celebraciones. El biryani se cocina por capas, combinando arroz, carne, verduras y especias, cocidos al vapor hasta lograr una mezcla uniforme de texturas y aromas. Se decora con frutos secos, cebolla frita y a veces azafrán. Cada región de Pakistán tiene su versión propia, y todas son un festín de sabor.
Postres que conquistan paladares
Los dulces paquistaníes son tan intensos como su cocina. Destacan el kheer (pudín de arroz), el seviyan (pudín de fideos con pistachos y azafrán), el clásico gulab jamun (bolas de masa fritas en almíbar) y el falooda, un postre-bebida en capas con helado, semillas de chía, gelatina y agua de rosas.
Bebidas tradicionales: el chai como ritual diario
El chai (té negro con leche, azúcar y especias como nuez moscada o cardamomo) es una institución nacional. Más que una bebida, es parte del alma social de Pakistán. En los meses cálidos, destacan el lassi (batido de yogur dulce o salado), el nimbu pani (limonada especiada) y el jugo de caña de azúcar.
Conclusión: un mapa cultural en cada plato
La gastronomía pakistaní es mucho más que sabor: es identidad, historia y herencia. Cada plato cuenta una historia ancestral, cada especia evoca un rincón del país, y cada comida compartida es una celebración de hospitalidad.
Explorar la cocina de Pakistán es embarcarse en un viaje por Asia Central, la India y el Medio Oriente, sin salir de la mesa. Y quizás, en uno de sus guisos intensos o postres delicados, encuentres tu nuevo plato favorito.