Suecia y Finlandia han mantenido durante muchos años su neutralidad respecto de los intereses políticos entre Estados Unidos y Rusia; sin embargo esto ha cambiado repentinamente con la invasión de Rusia a Ucrania. A tal punto que han solicitado formalmente su ingreso a la OTAN.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, expresó: “Se trataba de “un paso histórico”, de hacerse realidad esta intención, significaría un cambio importante en el tablero geopolítico internacional”.
Sabido es que Finlandia y Suecia mantienen contactos cercanos con la OTAN desde hace tiempo, incluso colaborando con ejercicios militares marítimos y aéreos.
Uno de los requisitos principales para ingresar es que se destine el 2% del Producto Interior Bruto a gastos de defensa, cosa que Finlandia ya lo hace y Suecia se compromete a alcanzar en los próximos años.
Por otra parte, cabe destacar que el Artículo 5 de la OTAN se refiere a la defensa colectiva e implica que un ataque contra un aliado es considerado también como un ataque al resto de miembros.
No obstante, para ser aceptados en dicha alianza militar, ambas naciones deben obtener la aprobación de todos los países integrantes de la OTAN.
Recientemente el Presidente de la República de Turquía, S.E. Recep Tayyip Erdoğan, ha manifestado públicamente su firme oposición a las intenciones de Finlandia y Suecia.
En tal sentido, Ámbito Internacional consulto al Embajador de Turquía en Argentina, S.E. Ş. Vural Altay, acerca de esta postura.
Las recientes declaraciones realizadas por el Presidente de la República de Türkiye, S.E. Recep Tayyip Erdoğan con respecto a nuestras posturas sobre la posible membresía de Suecia y Finlandia en la OTAN están relacionadas con nuestras propias preocupaciones de seguridad nacional. Türkiye siempre ha apoyado la ampliación de la OTAN sobre la base de que todos los miembros defienden el principio de solidaridad en caso de una amenaza a la seguridad. Esto requiere coherencia por parte de los miembros en su respuesta a todas las formas de amenazas a la seguridad, incluido, entre otros, el terrorismo. Es decir, si un miembro de la OTAN lucha contra un grupo terrorista y otro miembro lo apoya para derrotar a otro grupo terrorista, se crea una situación paradójica. Tal enfoque selectivo por parte de cualquier miembro en la lucha contra el terrorismo genera lagunas en la cooperación en materia de seguridad.
En este sentido, nuestro llamamiento para abordar las preocupaciones legítimas de seguridad nacional de Türkiye dentro de la OTAN, cuyo objetivo principal es garantizar la seguridad colectiva de sus miembros, está en total conformidad con la naturaleza y esencia de la OTAN. La principal expectativa de Türkiye de Suecia y Finlandia es bastante clara. Exigimos una garantía concreta y firme de nuestra seguridad nacional sobre la base de que estos países no mostrarán ningún apoyo político, financiero o armamentístico por ningún motivo a las organizaciones terroristas como el PKK, sus afiliados en Siria PYD/YPG, FETÖ o cualquier otro.
PKK/PYD es una organización terrorista reconocida como tal por 38 países, incluidos miembros de la OTAN y de la UE, y representa una grave amenaza para la seguridad nacional de Türkiye. Desde 2017, Türkiye solicitó la extradición de algunos miembros del PKK/PYD y FETÖ de Suecia, pero hasta el momento no ha recibido una respuesta positiva. En cambio, miembros de estas organizaciones terroristas son recibidos por algunos ministros suecos y reciben apoyo moral, financiero y armamentístico para sus actividades. El gobierno sueco, además, proporciona equipamiento militar, especialmente antitanques y drones al PKK/PYD, como así también ha anunciado un apoyo financiero adicional de 376 millones de dólares a dicha organización terrorista. Además de eso, Suecia todavía no ha levantado las sanciones de armas que impuso a Türkiye en base a nuestras operaciones militares antiterroristas transfronterizas en Siria contra PYD/YPG.
Las preocupaciones antes mencionadas también fueron mencionadas al Presidente de Finlandia, Sauli Niinistö, la Primera Ministra de Suecia, Magdalena Andersson, así como el Secretario General de la OTAN, el Sr. Jens Stoltenberg, por S.E. Recep Tayyip Erdoğan, presidente de Türkiye en conversaciones telefónicas separadas el 21 de mayo de 2022. El secretario general Stoltenberg reconoció que las preocupaciones legítimas de seguridad nacional de Türkiye deben ser cumplidas y garantizadas. De acuerdo con esto, llevaremos a cabo consultas con las delegaciones sueca y finlandesa en Ankara el 25 de mayo de 2022 con respecto a sus solicitudes de ingreso en la OTAN. La delegación turca estará encabezada por el Embajador İbrahim Kalın, Portavoz Presidencial y el Embajador Sedat Önal, Viceministro de Relaciones Exteriores, y las Delegaciones sueca y finlandesa estarán encabezadas por el Sr. Oscar Stenström, Secretario de Estado, Oficina del Primer Ministro de Suecia y el Sr. Jukka Salovaara, Secretario de Estado Permanente de Finlandia respectivamente.
Obviamente, los esfuerzos antiterroristas en ausencia de una cooperación internacional sólida y genuina están condenados al fracaso. Los pilares fundamentales de la OTAN exigen una respuesta más coherente contra el terrorismo. Con ese fin, si Suecia y Finlandia retiran su apoyo a las organizaciones terroristas contra las que Türkiye ha estado luchando durante mucho tiempo y garantizan su solidaridad con Türkiye en el campo de la lucha contra el terrorismo, nuestra actitud hacia su adhesión a la OTAN cambiará en consecuencia.