En el corazón de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, un aroma distinto despierta la curiosidad de los visitantes. No proviene de las páginas nuevas ni de los puestos gastronómicos, sino de un espacio que emana tradición, hospitalidad y cultura: el pabellón de Arabia Saudita. Como ciudad invitada, el Reino despliega una propuesta que va más allá de los libros, invitando al público argentino y extranjero a vivir la experiencia del majlis, el ancestral ritual de encuentro donde el café saudita es el símbolo de bienvenida y respeto.
El stand Riyadh, Ciudad Invitada de Honor, de la 49ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, te invita a disfrutar el autentico café saudí.
El café ha sido un símbolo social y un mercado económico en la Península Arábiga durante siglos, profundamente arraigado en los valores y costumbres cotidianas de la sociedad.
El café saudí o cómo algunos les gusta llamarlo “oro negro” es más que una bebida caliente que se infiltra en el alma, forma parte de la identidad cultural del Reino y su preparación difiere del café árabe conocido en otros países. Se distingue por su preparación a partir de café Khawlani cultivado en regiones como Jazan y Al Baha, y la adición de ingredientes como cardamomo, azafrán o clavo para darle un sabor distintivo.
Cada sorbo es como una pieza musical, donde el sabor baila en las cuerdas del paladar, con un sabor irresistible, un sinfín de secretos, distinguido por su preparación especial y única, que se basa en la selección de granos de café de alta calidad y las especias que le dan un sabor distintivo y único.
El café saudí, como producto cultural distintivo del Reino, enfatiza la conexión entre la cultura y la identidad saudí, destacándose de la auténtica generosidad y hospitalidad saudí, con sus costumbres únicas, y la gran diversidad cultural del Reino. Esto se debe a la forma única en que la sociedad saudí lo aborda y a su atmósfera distintiva, en términos de cultivo, preparación y presentación, que no se encuentra disponible de la misma manera en ningún otro país.
El café está profundamente conectado con el patrimonio cultural que abarca una rica historia de costumbres y tradiciones, así como los valores y significados de la generosidad y la hospitalidad; extendiéndose atraves de su presencia en numerosos poemas, canciones y obras artísticas, convirtiéndose un símbolo cultural distintivo que distingue y caracteriza al Reino.
Aquí te vamos a contar por qué es único y especial? ¿Qué distingue a este café de otros tipos de café y por qué es el mejor?
El café saudí se sirve en un dallah tradicional y se vierte en tazas pequeñas sin añadir azúcar. Se sirve principalmente con dátiles. Estos rituales, que acompañan la preparación reflejan los valores de hospitalidad y generosidad que aprecian los saudíes.
Para preparar este café se requiere paciencia y precisión, digamos un arte en sí mismo. Cada paso de este proceso es un una gran tradición transmitida de generación en generación como parte de la identidad cultural.
El viaje comienza tostando cuidadosamente los granos hasta alcanzar la temperatura óptima; luego se muelen los granos obteniendo un polvo fino, al que se añaden cuidadosamente cardamomo y otras especias.
Con un sabor único y un equilibrio perfecto entre acidez y amargor, lo convierte en una opción favorita para los amantes del café a nivel mundial.
Entre algunas de sus variedades se destacan los granos de café Khawlani, cultivados en el suroeste en la región de Jazan, con un clima propicio, suelo fértil y a grandes altitudes. Sus granos se procesan cuidadosamente utilizando métodos tradicionales garantizando que se mantenga su alta calidad. El Khawlani, está clasificado como una de las mejores variedades de café del mundo y se considera un producto estratégico .
El Al-Shuyukh, está compuesto de una variedad de granos procedentes de diferentes regiones y son cuidadosamente seleccionados y tostados con un gran cuidado por importantes expertos para garantizar la alta calidad del producto.
El café Bashanfar Harari, su cafeína es de 40 miligramos, proveniente de granos especiales por lo que contiene la mejor mezcla de café arábigo.
El Umm Habal, ofrece una mezcla incomparable de sabores deliciosos y un aroma único, considerado el mejor café árabe instantáneo.
Aunque para disfrutarlo ya que es el auténtico estilo beduino, deberías beberlo en una taza de porcelana, ya que es el auténtico estilo beduino.
Arabia Saudita es uno de los mayores productores de café arábico del mundo, y los saudíes se encuentran entre los mayores consumidores de esta bebida, que hoy pueden conocer en el stand Riyadh, Ciudad Invitada de Honor, de la 49ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.